Relación entre estilos de comunicación ante el conflicto en mujeres y hombres adolescentes

Cecilia Sarahi De la rosa Vázquez*; María Leonor Ramos Morales**

*. Universidad Autónoma de Coahuila, México. (saracecy@hotmail.com), Universidad Autónoma de Coahuila, Universidad Autónoma de Coahuila, Mexico, E-mail: , **. Universidad Autónoma de Nuevo León, México. (ramos.leonor@gmail.com), Universidad Autónoma de Nuevo León, Universidad Autónoma de Nuevo León, Mexico, E-mail:



Resumen:

El objetivo del presente artículo fue examinar la relación que existe entre el estilo de comunicación ante el conflicto evitativo, agresivo y cooperativo de las mujeres y hombres adolescentes mexicanos de la ciudad de Saltillo, Coahuila, México. Se utilizó una metodología de corte cuantitativo, con diseño ex post facto de tipo transversal y con alcance correlacional. Se utilizó un muestreo de tipo no probabilístico, donde se aplicó la escala Conflictalk a 495 alumnos de secundaria: 227 mujeres y 268 hombres con edades que varían de los 11 a 16 años (M= 13.4), para después procesar la información en el paquete estadístico SPSS, versión 24. Se encontraron correlaciones de tipo positivas en ambos géneros a un nivel de significancia p≤.010. Se concluye que existen pocas diferencias significativas entre el estilo de mensaje ante el conflicto en mujeres y hombres adolescentes. No obstante, existe una tendencia mayor hacia la agresividad en los varones y mejor cooperatividad en las mujeres, pero con tendencia a la manipulación.

Received: 2020 September 12; Accepted: 2021 May 12

tla. 2021 Mar 31; 14

Keywords: Palabras clave: adolescentes, conflicto, hombres y mujeres.
Keywords: Keywords: Adolescents, conflict, men and women.

SUMARIO:

1. Introducción / 2. El conflicto / 3. Adolescencia y conflicto / 4. Estudios de estilos de mensaje ante el conflicto / 5. Diseño metodológico / 6. Resultados / 7. Conclusiones / 8. Bibliografía / 9. Anexos.

1. Introducción

La etapa de la adolescencia es compleja, hasta su concepto resulta difícil de definir con precisión, así lo indica el Informe sobre el Estado Mundial de la Infancia según UNICEF1 debido a que la madurez física, emocional y cognitiva es diferente en cada persona, por lo que no existe una definición aceptada internacionalmente sobre el concepto. En este sentido las Naciones Unidas establecen que los adolescentes son aquellas personas que comprenden una edad de 10 a 19 años, siendo la segunda década de la vida. Por lo que unir el conflicto en esta etapa de cambios en la vida humana resulta un tema que requiere ser estudiado debido a su complejidad.

Ante el conflicto se puede reaccionar con diferentes estilos de comunicación, algunas personas pueden responder de forma cooperativa, otros agresiva y algunos buscarán cualquier forma de evitarlos. El ser humano puede seleccionar de forma consciente o inconsciente cualquiera de estos tipos para reaccionar ante las controversias o problemas de su vida cotidiana.

Por lo que el objetivo principal de esta investigación fue examinar la relación que existe entre los tres diferentes estilos de comunicación ante el conflicto en hombres y mujeres adolescentes, asi como identificar si hay o no diferencias. La finalidad es comprobar la hipótesis de que existen diferencias por sexo entre sus distintas formas de reaccionar ante el conflicto.

El problema de estudiar el conflicto en los adolescentes reside en las consecuencias de un conflicto mal gestionado, como lo es desencadenar la violencia. Según los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico mencionan que casi 18.8 millones de alumnos de primaria y secundaria de escuelas públicas y privadas han padecido bullying. Por lo que México se posiciona en el primer lugar de bullying o acoso escolar, siendo el 59% de los suicidios de 10 a 13 años consecuencia del acoso que se vive en las escuelas como le menciona Gatica.2

Es por esa razón es pertinente realizar estudios que permitan conocer los estilos de comunicación ante el conflicto y su relación entre ellos en la población adolescente, para observar similitudes o diferencias en su comportamiento con el propósito de desarrollar estrategias específicas por sexo que promueven la disminución de la violencia entre los adolescentes.

2. El conflicto

Cuando se aborda el tema del conflicto existen diferentes posturas ante sus conceptualizaciones, autores como Fuquen3 lo definen como, un estado emotivo doloroso, que es generado por una tensión entre deseos opuestos que ocasionan contrariedades interpersonales y sociales, y en donde se presenta una resistencia reflejada en el estrés, una forma muy común de experimentarlo y este aparece como resultado de la incompatibilidad entre conductas, objetivos, percepciones o afectos entre individuos y grupos que plantean metas disímiles.

Caballero4 menciona que el conflicto es la consecuencia natural de la interacción, y señala que donde hay personas que se relacionan, trabajan, se divierten o aprenden juntas, en algún momento surgirá un conflicto y la consecuencia pude ser negativa o positiva y esto dependerá de cómo éste se gestione. Para Suárez 5 es un proceso que nace, crece, se desarrolla, puede a veces transformarse, desaparecer y/o disolverse, y otras veces permanece sin movimiento. Para Lederach6 uno de los autores más reconocidos sobre el tema, el conflicto no es algo que se da para siempre, indica que es un proceso que no tiene origen en una parte, es generado a partir de la lucha entre dos personas que en algún ámbito son incompatibles, ya sea en creencias, reacciones, cogniciones o conductas.

Kahneman y Tversky7 mencionan que los humanos no tienen conflictos en abstracto, sino que son construidos personalmente desde la interpretación subjetiva de una situación, la identificación y valoración que hace el individuo de sus intereses y los de las otras partes en dicha situación, lo que se conoce como “efecto del contexto”.

Desde un enfoque cognitivo del conflicto, Laca8 indica que es un proceso interactivo entre dos o más protagonistas a lo largo del cual éstos van decidiendo la estrategia o estilo de afrontamiento, son influidos por la evaluación de sus intereses propios y de los resultados que la otra parte obtenga, la relación entre estos resultados se le conoce como “el modelo del doble interés”.

3. Adolescencia y conflicto

Durante décadas se ha sostenido el perfil social de la adolescencia como una etapa distinguida por múltiples problemas y tensiones, como una fase de desconcierto tormentosa y estresante. A este perfil de la adolescencia, también ha contribuido la literatura científica al poner la acentuación en los adolescentes dificultosos con conflictos. Es como si los problemas de inadaptación social, inestabilidad emocional, comportamientos violentos, entre otros, fueran característicos en la adolescencia. Sin embargo, en los últimos tiempos, este pensamiento negativo de la adolescencia se ha sustituido por otro más optimista que resalta los aspectos positivos de este período de la vida, la adolescencia es vista como una etapa de avance durante el cual el individuo se afronta a una extensa diversidad de peticiones, conflictos y oportunidades.9

En este sentido se hace referencia a la etapa de la adolescencia como sinónimo de rebeldía, conflictuada, difícil para los adolescentes, porque se enfrentan a cambios físicos importantes en donde están obligados a reafirmar su imagen corporal y desarrollan diversos cambios cognitivos que los harán reflexionar sobre su pensamiento crítico lo cual les permitirá consolidar su personalidad.

Cuando se aborda el tema de los conflictos en adolescentes, se inicia desde una perspectiva en la que el conflicto es natural en todos los seres humanos, lo que se busca es la creación de técnicas o estrategias cooperativas que puedan inhibir el paso a la comunicación agresiva en cualquier ámbito en el que se encuentren los adolescentes y que esta sea una vía permeable hacia la violencia.

Al respecto Hernández10 menciona que, es importante reconocer que un conflicto es percibido de diferente manera por un adulto que por un adolescente, esto se puede explicar por la etapa que están atravesando los adolescentes, por esta razón la educación en todos los sentidos, debe proporcionar oportunidades suficientes para aprender a resolver conflictos de forma constructiva.

De acuerdo con Bucx y Seiffe-Kienke11 las experiencias de resolución constructiva o destructiva de conflictos interpersonales tienen un significado de largo alcance en el desarrollo del individuo, ya que menciona que un manejo constructivo beneficia en los adolescentes la posibilidad de desarrollar experiencia, por el caso contrario si el afrontamiento del conflicto es destructivo no fortalece el desarrollo personal y tiende a disminuir la calidad en sus relaciones.

Es relevante promover en el adolescente una percepción natural acerca del conflicto como una característica nata del ser humano, comprender que es inevitable no tener conflictos, lo que interesa es desarrollar habilidades para gestionarlos de forma constructiva, como señala Laca,12 una oposición de intereses no implica necesariamente culpa en las partes, el autor menciona que estos constructos deberían inculcarse desde el inicio de la educación de los jóvenes.

Existen diferentes tipos de conflictos en los adolescentes, y su percepción varía de acuerdo con el sexo, por lo cual se enumeran algunos de los tipos de conflictos más significativos en esta etapa:

Conflicto de imagen corporal, es la representación mental del cuerpo, que se va generando desde la niñez, y es en la adolescencia donde resulta valiosa para el desarrollo psicosocial del individuo. La imagen de cuerpo forma una parte muy importante de la autoestima de muchas personas especialmente en la etapa de la adolescencia.13 El atractivo físico y la imagen corporal tienen una relación muy precisa con la autoevaluación positiva del adolescente, con su notoriedad y la aceptación por parte de sus iguales. El atractivo físico influye en el desarrollo de la personalidad, en las relaciones sociales y en la conducta social, por lo tanto, esta imagen física juega un papel muy importante en la formación de la imagen de sí mismo. Para la aceptación de la imagen corporal se necesita paciencia y tiempo.

Conflicto de la afectividad (entendida como experiencias interiores en las que motivaciones, emociones y sentimientos se entremezclan de manera indefinida).14 En contra de lo que colectivamente se piensa, el afecto es un sentimiento sobre el estado de la propia conciencia que no se diferencia esencialmente del conocimiento que posee una persona. Es decir, el afecto es una forma muy única de instalar e interaccionar aspectos cualitativos del conocimiento en relación con las vivencias particulares,15 lo que involucra que el conocimiento influye en el desarrollo de la afectividad o ésta, a su vez, es una expresión del conocer.

Conflicto en la amistad menciona Giró,16 para los adolescentes está fundada en la construcción de grupos de pares o amigos, en quienes se cristaliza como elemento primordial para el desarrollo de las competencias sociales, esenciales para el crecimiento personal y el desarrollo de la autoestima.17 A través de los grupos de amigos, los adolescentes buscan edificar y enmendar su identidad, un sentido de pertenencia, la posibilidad de participar cualidades de vida y la apariencia de empatía emocional. La amistad en la adolescencia se convierte en la columna fundamental para los jóvenes que acaban de atravesar la pubertad, dado que la adolescencia es una época llena de cambios e incertidumbre para la mayoría de las personas.

En la siguiente tabla se resumen los principales conflictos que se presentan en la adolescencia, así como la diferencia entre hombres y mujeres.

Tabla 1.

Tipos de conflictos y diferencias entre hombres y mujeres.


Tipo de conflicto Hombre Mujer
Imagen corporal Está vinculado al sentimiento de efectividad de su propio cuerpo. Habilidades físicas, capacidad para competir, aumenta la fuerza, la altura y la habilidad atlética. Sensibilidad a las ideas sociales de atractivo físico. Muestra más grados de insatisfacción y sentimientos negativos de su propio cuerpo.
Afectividad Se asocia en los estudios con una mayor madurez mental y con una capacidad de liderazgo más marcada, son distantes o arrogantes, que solo se interesan por sí mismos y por satisfacer sus necesidades. Son más calmadas, centradas y empáticas, son más sensibles y expresivas, buscan ayudar a los demás y poseen relaciones más estables.
Amigos Empiezan a desarrollarse relaciones con base en la confianza, compañerismo, apoyo, comprensión, empatía, entre otro tipo de sentimientos que los acercan y hacen sentir cómodos. Es la experiencia de la atracción física de los adolescentes, aprenden a compartir sensaciones, sentimientos, emociones, comienzan a entender la importancia del compromiso, el respeto y la valoración por otra persona.

TFN1Fuente: elaboración propia basada en Rivarola, Macías Gómez, Pinillos y Giró.


Según los autores mencionados con anterioridad se muestran algunas diferencias entre hombres y mujeres adolescentes, sobre todo en el concepto de la imagen corporal, la cual tiende a generar más insatisfacción en las mujeres. Sobre la efectividad los hombres se caracterizan por el egoísmo y las mujeres por ser más sensibles y abiertas a la expresión de sentimientos. Respecto al tema de la amistad ambos buscan relacionarse desde el respeto.

4. Estudios de estilos de mensaje ante El conflicto

Los estilos para reaccionar ante el conflicto deben entenderse como la manera en que la persona se acerca a la otra parte ante una situación incómoda, en controversia, según Rahim y Bohoma18 los estilos de mensaje ante el conflicto se diferencian por dos dimensiones: interés propio refiriéndose a satisfacer su propio interés, e interés en los otros dónde el individuo satisface el interés de los demás. Para Ann y Yang19 los estilos de manejo de conflictos pueden definirse como aquellos patrones de comportamiento específicos que los individuos utilizan cuando se enfrentan con el conflicto. Según Lederach,20 son cinco las actitudes de comportarse ante un conflicto, éstas varían en cada una de las partes que se están confrontando, se describen las siguientes:

  • Competir: únicamente hay interés por satisfacer los deseos de sí mismo, sólo se piensa en lo suyo y no se preocupa por el otro, en efecto, lo que esta parte quiere, es su único criterio para seguir, por lo que olvida lo que los demás quieren.
  • Evitar: evade el conflicto a toda costa, y no afronta directamente los problemas, en el fondo lo que se comunica es que no importa ni lo que yo deseo ni lo que el otro quiere.
  • Convenir: negociar este estilo supone que uno no deja de preocuparse por lo suyo, pero modera cuando considera lo que el otro quiere, el problema se concibe como el esfuerzo de llegar al punto medio entre las dos posturas.
  • Acomodar: este estilo se da cuando una parte no se preocupa por lo suyo y solo busca satisfacer los deseos de la otra parte no confrontando, sino siempre cediendo y aceptando lo que los demás quieren.
  • Colaborar: permite preocuparse y perseguir los deseos y objetivos de uno y a la vez satisfacer los del otro, se esfuerza por encontrar una solución que beneficie a ambas partes.

Aunque Lederach plantea cinco estilos de mensaje ante el conflicto, este estudio se basa en los tres diferentes estilos de respuesta propuestos por Garai- gordobil& Maganto, 21 en la cual indican que las respuestas ante el conflicto pueden ser:

  • De manera evitativa: se da cuando se calla y no se manifiesta nada.
  • De manera agresiva: cuando no se respeta a los demás.
  • De manera cooperativa: cuando se expresan los deseos, sin ser pasivo y sin agredir, buscando el beneficio de ambas partes.

En este sentido, se describen las características de cada uno de los estilos que aborda el presente estudio:22

  • La comunicación asertiva o cooperativa es la capacidad de expresarse adecuadamente de acuerdo con su cultura y a las situaciones que se presentan en el transcurso de la vida. Por lo tanto, el comportamiento asertivo implica pensar, sentir y las acciones que favorecen en el adolescente a alcanzar las metas, de forma que la sociedad lo acepte. La capacidad de solicitar apoyo, recomendación y consejos. También se le conoce como comunicación asertiva porque el adolescente se comunica en forma efectiva cuando tiene una necesidad.23
  • La comunicación pasiva o evitativa se caracteriza por no defender sus ideas, sus pensamientos ni sus acciones, el adolescente toma una postura retirada, distante, su comunicación es con voz baja, habla poco y por lo general accede a las peticiones de los demás sin poner resistencia.
  • La comunicación agresiva su principal característica es la agresión, en estos casos los adolescentes dominan y desprecian a los demás, se expresan por medio de palabras inadecuadas, insultan, amenazan, suscitan miedo e intimidan al receptor, defienden sus derechos, pero agreden los de los otros.

Herrera24 menciona la urgencia de educar a esta población en la transformación de los conflictos, ya que por la etapa en la que se encuentran es oportuno que en este momento de la vida se les brinden las herramientas que faciliten los mensajes de comunicación cooperativos para solucionar los conflictos, debido a la repercusión positiva que puede generar en su futuro.

Sobre investigaciones relacionadas a la solución de conflictos, un estudio realizado en España midió la relación que existe en la solución de conflictos y la empatía, utilizando una muestra de 941 participantes, de adolescentes entre 8 y 15 años, los resultados indicaron que las chicas tienen puntuaciones superiores en empatía, las mujeres utilizan más estrategias de solución de conflictos positivas-cooperativas y los chicos más agresivos.25

Otro estudio relacionado a estudiantes y los estilos de mensaje ante el conflicto realizado a 1300 estudiantes universitarios, para conocer sus estilos de solución ante los conflictos, encontró que la mayoría de los jóvenes resuelven sus conflictos por evitación explicados por la competición.26

Sobre el tema una investigación realizada a estudiantes rusos y estadounidenses respecto a las estrategias de comunicación ante el conflicto indicó que los hombres tienden a ser más agresivos que las mujeres, por lo que suelen usar una estrategia de confrontación, pero en cuanto empieza a ser una conversación con más intensidad tienden a elegir estrategias de cooperación o de distanciamiento.27 Un estudio sobre diferencias de género desde un punto de vista contemporáneo sobre el tema de comunicación, arrojó que las mujeres en comparación con los hombres utilizan más formas de comunicación con más frecuencia como mensajes de texto, redes sociales y en línea.28

Respecto a estudios que se han realizado en el sector salud sobre las diferencias en la comunicación entre hombres y mujeres, se han encontrado resultados en donde los hombres enfermos muestran un umbral más bajo de expresar su malestar comparado con las mujeres que están igual de enfermas,29 un estudio realizado a parejas sobre los patrones de comunicación ante los conflictos señala que el neuroticismo y la escrupolocidad entre los hombres fueron los predictores más fuertes para evitar el conflicto.30

Diversos autores señalan la relevancia de crear programas en comunicación para los hombres universitarios, con el objetivo de reducir creencias destructivas y fomentar la comunicación asertiva.31 Este tipo de capacitaciones en hombres, han dado resultados positivos, ya que se ha comprobado que la intervención para el fortalecimiento de habilidades comunicativas en hombres aumenta los conocimientos y reduce actitudes asociadas con la socialización rígida y los conflictos entre género32.

Se requiere señalar que este tipo de estudios no son muy comunes, existe poca evidencia científica sobre estudios de comunicación y conflicto acentuando las diferencias entre sexos en una etapa como la adolescencia, por lo que no es sencillo encontrar evidencia empírica que permita contrastar más los resultados obtenidos en el estudio.

5. Diseño metodológico

Diseño

Se realizó un estudio de corte cuantitativo, con diseño ex post facto de tipo transversal con alcances comparativos y correlacionales, en donde se identificaron diferencias por sexo y se examinó la relación que existe entre el estilo de comunicación ante el conflicto evitativo, agresivo y cooperativo de las mujeres y hombres adolescentes de la ciudad de Saltillo, Coahuila México. Se realizó esta investigación debido al poco material sobre estudios de comunicación en esta etapa del ser humano, especificamente en las diferencias que pudieran fomentar estrategias más especificas para la capacitación en la comunicación ante el conflicto.

Participantes

La muestra fue de tipo no probabilístico, de forma intencional, la cual fue conformada por 495 participantes, en donde se encuestó a un total de 227 alumnas mujeres y 268 hombres de nivel secundaria. Las secundarias que participaron fueron: Telesecundaria Chapultepec, la Secundaria Pública no. 41, el Colegio Montessori y un colegio católico.

Instrumento

Se utilizó como instrumento un cuestionario dividido en dos apartados, el primero compuesto por preguntas que hacen referencia a los datos sociodemográficos de los participantes como edad, escolaridad e institución, entre otras. La segunda parte integrada por la escala Conflictalk en la adaptación española de Garaigordobil, Machimbarrena, & Maganto (2016), la prueba permite medir tres estilos de comunicación ante el conflicto: el enfocado en a sí mismo (agresivo), el estilo enfocado al problema (cooperativo) y el enfocado en los otros (evitativo).

El cuestionario está compuesto por 18 frases relacionadas a situaciones de conflicto en donde el participante puntúa cada frase de acuerdo a una escala del uno al cinco, indicando con ello desde que “Nunca digo cosas como esa” (1) hasta “Casi siempre digo cosas como esas” (5). La consistencia interna Alpha de Cronbach para los tres estilos fue en la versión adaptada fue de CO= .87; AG = .81 y EV = .63

Procedimiento

Posterior a la creación del instrumento se acudió a las cuatro secundarias para solicitar una cita con los directores y plantearles el propósito de la investigación y obtener autorización para la aplicación de la encuesta. Una vez que se autorizó la entrada para la aplicación de la encuesta, se agendaron las fechas que fueron durante el segundo semestre del 2018, por lo que se acudió a los salones de las escuelas donde se llevó a cabo mediante la heteroaplicación no remunerada.

Se les proporcionaron las instrucciones para contestar el instrumento, se les entregó la encuesta de forma física además de un lápiz en donde cada uno de los estudiantes de forma individual contestó el instrumento y posteriormente lo entregaron.

Análisis de datos

Por último, se procedió al vaciado de la información en el paquete estadístico SPSS versión 24, en donde se describió a la población de estudio a partir de las características demográficas, posteriormente se realizó un análisis compartivo mediante la prueba no paramétrica U de Mann Whitney (UMW) a un nivel de significancia £.010, para finalizar con un análisis de correlación a un nivel de significancia p≤ .010 entre el factor cooperativo, evitativo y agresivo.

6. Resultados

Se caracterizó a la población mediante un análisis de tipo descriptivo en donde se obtuvieron datos sociodemográficos que permiten describir mejor a los participantes. En el caso de las mujeres, el 17.2% estudiaba en la Telesecundaria Chapultepec, 51.5% en la Secundaria Pública no. 41, 11.9% en el Colegio Montessori (11.9%) y 19.4% en el colegio católico. Las edades de las adolescentes son de los 11 a los 16 años (M= 13.4, DE=1.06). La mayoría vive con papá y mamá (71.4%), mismos que se encuentran casados (70.5%). La mayoría de las adolescentes indicó que no fuma (94.7%), no consumen alcohol (88.5%), no consumen drogas (99.6%) y se comunican con sus padres en persona (58.1%) y mediante llamadas o redes sociales (41.8%).

En el caso de los hombres, el 20.1% pertenecen a la Telesecundaria Chapultepec, el 43.6% a la Secundaria Pública no. 41, el 13.8% al Colegio Montessori y el 22.4% a un colegio católico. Las edades de 11 a los 16 años (M=13.4, DE=1.04). La mayoría vive con papa y mamá (74.3%), mismos que se encuentran casados (72.8%). La mayoría de las adolescentes indicó que no fuma (92.9%), no consumen alcohol (88.1%), no consumen drogas (95.9%) y se comunican con sus padres en persona (47.4%) y mediante llamadas o redes sociales (52.6%).

Posteriormente se realizó un análisis comparativo mediante la prueba no paramétrica U de Mann Whitney (UMW) a un nivel de significancia £.010, en donde se utilizó como variable agrupadora el sexo de los participantes y como variables de contraste las tres dimensiones del instrumento conflictalk. Se encontraron diferencias significativas por sexo en el apartado de cooperatividad (tabla 2) en donde en situaciones cuando se inicia una conversación para platicar y aclarar algún problema, las mujeres adolescentes son las que optan por este tipo de conversaciones en comparación con los hombres.

Tabla 2.

Análisis comparativo del apartado de cooperatividad del instrumento conflictalk.


Sexo N RP SR U-M-W p
Qué está pasando, necesitamos hablar femenino 228 273.33 62319.5 25246.5 .000
masculino 270 229.38 61931.5
Necesitamos aclarar juntos cuál es el problema.

femenino

masculino

228

270

269.77

232.38

61507.5

62743.5

26158.5 .003

TFN2RP: rango promedio; SR: suma de rangos; UMW: prueba U de Mann Whitney; p < 0,010


Sobre el apartado de agresividad (tabla 3) se encontró una diferencia significativa por sexo, en donde respecto a comportamientos donde se culpabiliza al otro y no existe interés por ayudar en algun conflicto o problema, son en los hombres adolescentes los que optan por este tipo de comportamientos.

Tabla 3.

Análisis comparativo del apartado de agresividad del instrumento de conflictalk.


Sexo N RP SR U-M-W p
¡Es culpa tuya y no voy a ayudarte! femenino 228 232.25 52953.5 26847.5 .004
masculino 270 264.06 71297.5

TFN3RP: rango promedio; SR: suma de rangos; UMW: prueba U de Mann Whitney; p < 0,010


Por último se realizó un análisis de tipo correlacional entre los tres tipos de mensaje ante el conflicto: evitativo, agresivo y cooperativo en hombres y mujeres adolescentes, a un nivel de significancia p≤.010. Se presentan los resultados en el primer apartado de los hombres y posteriormente de las mujeres. Al explorar el indicador evitativo con el indicador agresivo (tabla 4) se encontraron correlaciones positivas, en donde en la medida que se mencionen frases que eviten el conflicto como no sé qué decir, serán señalados como estúpidos (.240**) y tratados como inútiles (.184**); entre más sugieran hacer las cosas por su lado, evitando las situaciones serán obligados (.199**), señalados como estúpidos (.191**), manipulados (.170**) y apartados por inútiles (.303**). Cuando los adolescentes masculinos opten por olvidar el asunto serán tratados como estúpidos (.207**), manipulados (.235**) e inútiles (.210**). En la medida que cedan ante una situación que genera conflicto serán constantemente agredidos tratando de callarlos (.248**), obligados (.210**), tratados como estúpidos (.240**), pedir las cosas a otra persona (.334**), tratarlo como inútil (.241**). Entre más quieran evitar el conflicto más se les manipulará (.208**).

Tabla 4.

Análisis de correlación por sexo en hombres con el indicador evitativo y el indicador agresivo.


P1 P2 P3 P4 P5 P6
No te sirvo de ayuda, nunca sé qué decir. .240 .184
No quiero hacer esto nunca más, vamos cada uno por su lado. .199 .191 .170 .303
Esto no va a ninguna parte, olvidemos todo el asunto ¿de acuerdo? .207 .235 .210
De acuerdo, me rindo, lo que tú quieras. .248 .210 .240 .334 .241
Quisiera que pudiéramos evitar el asunto. .208

TFN4Nota: Correlacional a un nivel de significancia p≤.010.

TFN5P1= ¡Cállate! ¡No tienes razón! No voy a escucharte; P3= Harás lo que yo te digo. ¡Te voy a obligar!; P4= No te das cuenta lo estúpido que eres; P5= Si no quieres hacerlo olvídalo; ya se lo pediré a algún otro; P6= No puedes hacer nada, apártate de mi camino y déjame hacerlo.


Por otro lado, al explorar el indicador agresivo con el indicador de cooperatividad en los adolescentes hombres a un nivel de significancia de p≤.010 (tabla 5) se encontró correlación en sólo dos ítems, por lo que en la medida que se trate de manipular a los adolescentes, éstos tenderán a optar por trabajar en equipo para sacar las cosas adelante (.224**) y tomarán la iniciativa de aclarar juntos los problemas (.256**) (.176**).

Tabla 5.

Análisis de correlación por sexo en hombres del indicador agresivo y el indicador cooperativo.


Trabajaremos para sacar esto adelante Necesitamos aclarar juntos cual es el problema.
Si no quieres hacerlo, olvídalo; ya se lo pediré a algún otro. .224 .256
No puedes hacer nada, apártate de mi camino y déjame hacerlo. .176

TFN6Nota: Correlacional a un nivel de significancia p≤.010.


Dentro del análisis de correlación del indicador evitativo con el indicador cooperativo (tabla 6) se encontró́ que en la medida en que los adolescentes varones eviten hablar, se les incitará a hablar (.333*), encontrar una solución (.283**) y trabajar para sacar las cosas adelante (.171**). Al querer evitar hablar, más se les incitará a hacerlo (.225**). Al querer evitar el asunto, se les incitará a hablar (.286**), aclarar las cosas (.398**), encontrar soluciones (.378**), sacar las cosas adelante (.296**), llegar al problema (.371**) y trabajar en conjunto (.242**). En la medida en que se rinda, se trabajará para salir adelante (.225**). En la medida que se quiera ir cada uno por su lado, se le va a incitar a hablar (.222**). En la medida que se quiera olvidar del tema, se le va a incitar a hablar (.318**).

Tabla 6.

Análisis de correlación por sexo en hombres del indicador evitativo y el indicador cooperativo


P1 P2 P3 P4 P5 P6
No se me da bien esto. Simplemente no sé cómo hacer que te sientas mejor. .333 .283 .171
No te sirvo de ayuda, nunca sé qué decir. .225
Quisiera que pudiéramos evitar este asunto. .286 .398 .378 .296 .371 .242
De acuerdo, me rindo, lo que tú quieras. .225
No quiero hacer esto nunca más, vamos cada uno por su lado. .222 .213 .170 .238
Esto no va a ninguna parte, olvidemos todo el asunto ¿de acuerdo? .291 .313 .218 .221 .318 .230

TFN7Nota: Correlacional a un nivel de significancia p≤.010

TFN8P1= Qué está pasando, necesitamos hablar; P2= Tenemos que aclarar esto; P3= Vamos a hablar sobre esto y encontrar una solución; P4=Trabajaremos para sacar esto adelante; P5=Necesitamos aclarar juntos cuál es el problema; P6=Funcionará si trabajamos juntos.


Respecto a las mujeres adolescentes se encontraron correlaciones positivas. En el indicador agresivo con el cooperativo (tabla 7) se identificó que utilizarán la manipulación para tratar de hablar (.129**), aclarar las cosas (.196**), trabajar para sacar las cosas adelante (.195**), aclarar en conjunto cual es el problema (.270**) y hacer que funcionen las cosas (.123**).

Tabla 7.

Análisis de correlación por sexo en mujeres del indicador agresivo y el indicador cooperativo.


P1 P2 P3 P4 P5 P6
Si no quieres hacerlo, olvídalo; ya se lo pediré a algún otro .129 .196 .195 .270 .123

TFN9Nota: Correlacional a un nivel de significancia p≤.010

TFN10P1= Qué está pasando, necesitamos hablar; P2= Tenemos que aclarar esto; P4=Trabajaremos para sacar esto adelante; P5=Necesitamos aclarar juntos cuál es el problema; P6=Funcionará si trabajamos juntos.


En la correlación del indicador evitativo con el agresivo (tabla 8), se encontró que en la medida en la que se les culpe, no sabrán qué decir (.224**). Mientras más cedan dando la razón al otro, más se les callará (.272**), se les culpará (.276**), se les tratará como estúpidas (.281**), manipuladas (.252**), tratadas como inútiles (.210**). Entre más se alejen de los problemas serán manipuladas (.341**) y tratadas como inútiles (.283**). Por último, entre más opten por olvidar el problema, serán tratadas como inútiles (.322**).

Tabla 8.

Análisis de correlación por sexo en mujeres del indicador evitativo y el indicador agresivo.


P1 P2 P3 P4 P5 P6
No te sirvo de ayuda, nunca sé que decir. .224
De acuerdo, me rindo, lo que tú quieras. .272 .276 .281 .252 .210
No quiero hacer esto nunca más, vamos cada uno por su lado. .341 .283
Esto no va a ninguna parte, olvidemos todo el asunto ¿de acuerdo? .322

TFN11P1= ¡Cállate! ¡no tienes razón! No voy a escucharte; P2= ¡Es culpa tuya y no voy a ayudarte!; P4= ¿No te das cuenta lo estúpido que eres? P5=; Si no quieres hacerlo, olvídalo; ya se lo pediré a algún otro; P6= No puedes hacer nada, apártate de mi camino y déjame hacerlo.


Para finalizar se correlacionó el indicador evitativo con el cooperativo en las adolescentes (tabla 9) y se identificó que en la medida que las mujeres adolescentes se les quiera evitar el conflicto, van a querer hablar sobre el tema (.274**), van a aclarar las cosas (.366**), evitarán encontrar soluciones (.268**), no trabajarán para sacar las cosas adelante (.236**), no aclarar el problema (.267**) y no harán que funcionen las cosas (.207**). Cuando se requiera trabajar para sacar las cosas adelante, optarán por la individualidad (.280**), al igual que si se pide aclarar en conjunto el problema (.247**). Por último, las adolescentes al ser confrontadas para aclarar optarán por olvidar el problema (.209**), al igual que si se quiere aclarar en conjunto dirán que las cosas no van para ninguna parte (.197**).

Tabla 9.

Análisis de correlación por sexo en mujeres del indicador evitativo y el indicador cooperativo.


P1 P2 P3 P4 P5 P6
Quisiera que pudiéramos evitar este asunto. .274 .366 .268 .236 .267 .207
No quiero hacer esto nunca más, vamos cada uno por su lado. .280 .247
Esto no va a ninguna parte, olvidemos todo el asunto ¿de acuerdo? .209 .241 .251 .316 .197

TFN12P1= Qué está pasando, necesitamos hablar; P2= Tenemos que aclarar esto; P3= Vamos a hablar sobre esto y encontrar una solución; P4=Trabajaremos para sacar esto adelante; P5=Necesitamos aclarar juntos cuál es el problema; P6=Funcionará si trabajamos juntos.


7. Conclusiones

Los resultados arrojados dentro del estudio que se realizó permiten identificar que la hipotesis propuesta no se rechaza, debido a que se encontraron diferencias significativas entre hombres y mujeres adolescentes. Estas diferencias son pocas sobre todo en los apartados de cooperatividad, en la que los resultados favorecen a las mujeres así como se aborda en los estudios teóricos, en donde se señala a las mujeres con puntuaciones superiores en aspectos de empatía y seleccionar solucionar conflictos de forma positivo cooperativos, sobre todo en el tema de la comunicación ya que se concentran en buscar más formas de comunicación, en este caso, se evidencia que son las que toman la iniciativa para hablar y para aclarar de alguna forma cuales son los problemas.

En el caso de los hombres adolescentes se encontró una diferencia significativa en el apartado de agresividad, lo cual es similar a lo que los estudios empíricos que abordan sobre la forma de solucionar los conflictos de los varones, la cual es más agresiva, tienden a usar más las confrontación, en este aspecto se evidenció la tendencia a culpar y no ayudar, por lo que los estudios empíricos siguen evidenciando diferencias en la comunicación que existen entre los hombres y mujeres, siendo que los hombres tienen a expresar menos lo que sienten.

La relación que se evidencia en los resultados señalan correlaciones positivas cuando se relacionan los tres tipos de mensaje ante el conflicto tanto en hombres como en mujeres, se encontró que tanto en hombres como en mujeres no existe mucha relación entre el estilo de comunicación ante el conflicto agresivo con el cooperativo.

En los hombres hay relación entre estilo evitativo con el agresivo, por lo que entre más se quiere evitar el conflicto más habrá una tendencia a la manipulación a ser agredidos, señalados y nombrados como inútiles. Se encontró relación entre el indicador agresivo y el indicador cooperativo, en la medida que se manipula a los hombres optarán por trabajar en equipo para sacar las cosas adelante. Existe relación entre el indicador evitativo y cooperativo, en la medida que más eviten, tenderan a ser incitados a hablar y solucionar los problemas.

Respecto a las mujeres adolescentes se encontró una correlación positiva entre el indicador agresivo con el cooperativo, por lo que en la medida que utilicen la manipulación podrán aclarar la cosas, trabajar para sacar las cosas adelante y hacer que funcionen. Se encontró relación con el indicador evitativo y agresivo, por lo que en la medida que se les culpe no sabrán qué decir, cuanto más eviten el problema más se les callará, se les tratará como inútiles y con agresividad. Sobre el indicador evitativo y cooperativo se encontró que en la medida que se les quiera evitar el conflicto, van a establecer comunicación señalando que se necesita hablar, aclarar trabajar para solucionar, aclarar cual es el problema.

Se sugiere seguir realizando estudios en el tema de comunicación y conflicto por género, especificamente en la relación del estilo de comunicación ante el conflicto, con el objetivo de generar estrategias preventivas, debido a la generación de respuestas agresivas que se producen en los adolescentes masculinos y la tendencia a la manipulación de las mujeres.


1.

fn1 UNICEF. (2011). Estado Mundial de la Infancia 2011. Obtenido de UNICEF: https://www.unicef.org/spanish/sowc2011/

2.

fn2Gatica Porcayo, G. (2017). Una mirada multidisciplinaria al bullying en México. Obtenido de CONACYT Agencia Informativa, Disponible en: http://www.conacytprensa.mx/index.php/ciencia/humanidades/13789-mirada-multidisciplinaria-bullying-mexico

3.

fn3 Fuquen Alvarado, M. E.. Los conflictos y las formas alternativas de resolución. Tabula Rasa. (1), 2003, pp. 265-278.

4.

fn4 Caballero González, A. El conflicto interpersonal como oportunidad para el aprendizaje. Investigación & Desarrollo, 2002, pp. 2-13.

5.

fn5Suarez (1996, como se citó en Fuquen, 2003)

6.

fn6 Lederach, J. P. Construyendo la paz. EEUU: bakaez, 1998

7.

fn7 Kahneman y Tversky (1984, como se citó en Laca, 2006)

8.

fn8 Laca Arocena, ,. F., “Cultura de paz y psicología del conflicto”. (U. d. Colima, Ed.) Estudios sobre las Culturas Con- temporáneas, XII (24), 2006, pp. 55-70.

9.

fn9 Berger, Kathleen, Psicología de Desarrollo, Madrid, España, Medica Panamericana, 2006.

10.

fn10 Hernández Perales, R. d., La problemática de los grupos vulnerables visiones de la realidad. Saltillo, Coahuila, 2018

11.

fn11 Bucx y Seiffe-Kienke (2010 como se citó en Luna, 2017). Luna Bernal, A. C., “Relación entre estilos de manejo de conflictos y empatía multidimensional en adolescentes bachilleres”. Revista Iberoamericana de las Ciencias Sociales y Humanísticas, 6 (12), 2017, pp. 2-27.

12.

fn12Laca Arocena, ,. F. , 2006

13.

fn13 Rivarola, María Fernanda, “La imagen corporal en adolescentes mujeres. Su valor predictivo en trastornos alimenticios”, Revista Fundamentos en Humanidades. Universidad Nacional de San Luis, Argentina, Año IV Número I/ II (7/8) 2003, pp. 149.161.

14.

fn14 Macías Gómez, Escolástica, Los padres y el desarrollo del equilibrio afectivo en los adolescentes, Orientadora del IES “Rey Pastor” (Madrid).

15.

fn15 Pinillos, José Luis, Principios de psicología. Madrid. Alianza Universidad. 1976.

16.

fn16 Giró, Joaquín, “Las amistades y el ocio de los adolescentes, hijos de la inmigración”, Papers Revista de Sociología, Universidad de la Rioja, España, Vol. 96, 2011, pp. 77-95.

18.

fn18 Rahim y Bohoma (1979, como se citó en Pelagajar, 2018) Pelagajar Palomino, M. d., Análisis del estilo de gestión del conflicto interpersonal en estudiantes universitarios. (O. d. Iberoamericanos, Ed.) Revista Iberoamericana de Educación, 77 (2), 2018, pp. 9-30.

19.

fn19 Ann, B.-Y., & Yang, C.-C. El papel moderador de los rasgos de personalidad en la inteligencia emocional y los estilos de gestión de conflictos. Psychological Reports, 10 (3), 2012, pp. 1021-1025.

20.

fn20 Lederach, J. P. “Elementos para la resolución de conflictos”. Revista en Derechos Humanos (11), 1990

21.

fn21 Garaigordobil, M., & Maganto, C., “Empatía y resolución de conflictos durante la infancia y la adolescencia”. Revista Latinoamericana de Psicología, 2011, Disponible en: http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-05342011000200005

22.

fn22 Corrales Pérez, Alejandra; Quijano León, Nayely K.; Góngora Coronado, Elías Alfonso. “Empatía, comunicación asertiva y seguimiento de normas. un programa para desarrollar habilidades para la vida”, Enseñanza e Investigación en Psicología, vol. 22, núm. 1, enero-abril, 2017, pp. 58-65 Consejo Nacional para la Enseñanza en Investigación en Psicología A.C. Xalapa, México Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=29251161005.

23.

fn23 Mantilla, L., Habilidades para la vida: una propuesta educativa para convivir mejor. Bogotá: Fe y Alegría, 2002

24.

fn24 Herrera García, T., Mediación Escolar en Centros de Educación Secundaria Obligatoria. Universidad de Valladolid, 2016

25.

fn25 Garaigordobil , M., & Maganto, C., “Empatía y resolución de conflictos durante la infancia y la adolescencia”. Revista Latinoamericana de Psicología, 2011, Disponible en: http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-05342011000200005

26.

fn26 Parra Cabrera, H., & Jiménez Bautista, F., “Estudios de Resolución de Conflictos en Estudiantes Universitarios”. Logos ciencia y tecnología, 2016, Disponible en: http://revistalogos.policia.edu.co/index.php/rlct/article/view/275.

27.

fn27 Fomin, A. G., & Yakimova, N. S., Communication Strategies in Conflict Discourse: Cross-cultural Experimental Research. Procedia - Social and Behavioral Sciences, 236, 2016, pp. 65-70. doi: https://doi.org/10.1016/j.sbspro.2016.12.021

28.

fn28 Kimbrough, A. M., Guadagno, R. E., Muscanell, N. L., & Dill, J., Gender differences in mediated communication: Women connect more than do men. Computers in Human Behavior, 29(3), 2013, pp. 896-900. doi: https://doi.org/10.1016/j.chb.2012.12.005

29.

fn29 Lasselin, J., Lekander, M., Paues-Göranson, S., Olsson, M. J., & Axelsson, J., Communication of health in experi- mentally sick men and women: A pilot study. Psychoneuroendocrinology, 87, 2018, pp. 188-195. doi: https://doi.org/10.1016/j.psyneuen.2017.10.024

30.

fn30 Heaven, P. C. L., Smith, L., Prabhakar, S. M., Abraham, J., & Mete, M. E., Personality and conflict communica- tion patterns in cohabiting couples. Journal of Research in Personality, 40(5), 2006, pp. 829-840. doi: https://doi.org/10.1016/j.jrp.2005.09.012

31.

fn31 Shafer, A., Ortiz, R. R., Thompson, B., & Huemmer, J. The Role of Hypermasculinity, Token Resistance, Rape Myth, and Assertive Sexual Consent Communication Among College Men. Journal of Adolescent Health, 2018, 62(3, Supplement), S44-S50. doi: https://doi.org/10.1016/j.jadohealth.2017.10.015.

32.

fn32 Bartholomew, N. G., Hiller, M. L., Knight, K., Nucatola, D. C., & Simpson, D. D., Effectiveness of communication and relationship skills training for men in substance abuse treatment. Journal of Substance Abuse Treatment, 18(3), 2000, pp. 217-225. doi: https://doi.org/10.1016/S0740-5472(99)00051-3

Appendix
Anexos.
Escala conflictalk

Cuestionario para medir los estilos de mensaje en el manejo del conflicto

A continuación se presentan 18 frases que pueden ser expresadas en una situación de conflicto, lee las frases e informa en qué medida tú sueles decir cosas como las que se indican en las frases. Da una puntuación de 1 a 5, donde 1 sería que tú “nunca dices cosas como las que dice la frase”, 2 “A veces”, 3 “con cierta frecuencia”, 4 “muy frecuentemente” y 5 “casi siempre dices cosas como esas”. Marca con una cruz la opción de 1 a 5 elegida en cada frase.

  1. ¿No te das cuenta de lo estúpido que eres?
  2. No se me da bien esto. Simplemente, no sé cómo hacer que te sientas mejor
  3. ¿Qué está pasando? Necesitamos hablar
  4. No te sirvo de ayuda. Nunca sé qué decir
  5. Tenemos que concretar eso
  6. Quisiera que pudiéramos evitar todo este asunto
  7. Vamos a hablar sobre esto y encontrar una solución
  8. ¡Cállate! ¡No tienes razón! No voy a escucharte
  9. ¡Es culpa tuya! Y no voy a ayudarte
  10. Harás lo que yo te digo. ¡Te voy a obligar!
  11. Funcionará si trabajamos juntos
  12. Trabajaremos para sacar esto adelante
  13. De acuerdo, me rindo, lo que tú quieras
  14. No quiero hacer esto nunca más. Vamos cada uno por su lado
  15. Esto no va a ninguna parte, olvidemos todo el asunto, ¿de acuerdo?
  16. Si no quieres hacerlo, olvídalo; ya se lo pediré a algún otro
  17. Necesitamos concretar juntos cuál es el problema
  18. No puedes hacer nada. Apártate de mi camino y déjame hacerlo

Bibliografía
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
15.
16.
17.
18.
19.
20.
21.
22.
23.
24.
25.
26.
27.
28.
29.
30.
31.
32.

Enlaces refback

  • No hay ningún enlace refback.




Copyright (c) 2021 DÍKÊ. Revista de Investigación en Derecho, Criminología y Consultoría Jurídica

Licencia Creative Commons
DIKE por Benemérita Universidad Atónoma de Puebla se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Basada en una obra en www.dike.buap.mx.